- Sostiene Plaqueta: imágenes electorales totalmente inútiles
Hace unos días el lector Rigoberto González Piña me comentaba su impresión sobre las fotos del bombardeo israelí de la playa. Se refería a un bombardeo realizado por Israel sobre la playa palestina de Al Sudaniya, que se encontraba repleta de bañistas: "Aparecían dos imágenes: a la izquierda, el navío disparando sus misiles contra la playa, y a la derecha, el cuerpecito de un niño de un año junto al de su hermanita, ambos muertos por los bombardeos. Estas imágenes me turbaron. La inteligencia humana ha logrado desarrollar los adelantos de la navegación marítima, y la precisión del lanzamiento de misiles depende de alta tecnología que incluso hace uso de satélites lanzados al espacio por medio de ingenios también muy avanzados, producto de los últimos conocimientos generados por la ingeniería y otras ciencias. Así, en la actualidad, al lanzar un misil se tiene la certeza de dónde va a caer porque su blanco se programa antes del disparo. La fotografía de ayer es una prueba de que el ingenio humano va a la par de su demencia: el barco que disparaba un misil fabricado para destruir edificios blindados estaba dirigido a hacer blanco en dos niños inermes, no se dirigía a acabar con una fortaleza militar; los operadores apuntaron deliberadamente a esos niños y además recibieron órdenes para ello. ¿No te parece demencial? Desde que era adolescente no me preguntaba en qué mundo estoy viviendo".
Soldados israelíes disparan obuses hacia el norte de la Franja de Gaza (Foto: EFE)
Los habitantes de Gaza y Cisjordania no tienen trabajo, viven de la caridad pública mundial, están presos en jirones de su propio territorio y cuando acuden a la única playa que les queda a los palestinos son bombardeados por la artillería israelí, para la cual resulta claro que los niños de un pueblo que ha engendrado terroristas no tienen derecho a tomar el sol ni a ponerse traje de baño ni mucho menos a construir castillos en la arena. En cambio, la corrección política mundial exige a los vencidos, a los despojados de país, de costas, de olivares, de viviendas, de ciudades, de espacio aéreo y de agua, que se comporten como si fueran burócratas suizos de clase media. "Moderación y prudencia", les recomiendan los dignatarios de la ONU mientras los misiles israelíes siguen cayendo sobre casas y automóviles y bebés y platos de sopa. Quienes ordenan el lanzamiento de los proyectiles, como Ehud Olmert, no deben ser considerados terroristas: usan corbata y disponen de tanques de última generación y aviones supersónicos. Cada F-16 de los usados por la Fuerza Aérea Israelí cuesta 25 millones de dólares, que es como el triple de la limosna mensual que la Unión Europea manda a los palestinos. Terrorista es un adjetivo para los desharrapados, los que se enfrentan con cohetes caseros y tanques de gas doméstico a una potencia nuclear. Quién les manda ser pobres y derrotados.
Uno de esos cazabombarderos destruyó antier el principal generador eléctrico de Gaza. Ahora, unos 600 mil terroristas -porque ahí todos son terroristas: hombres, mujeres y niños- se han quedado sin energía y, por ende, sin agua potable. Lo tienen bien empleado. Cómo se les pudo ocurrir a algunos de ellos atacar un puesto militar israelí, matar a dos efectivos y capturar a otro. Eso que en cualquier conflicto constituye una acción militar legítima, eso que no puede ser considerado terrorismo salvo si los autores son palestinos o iraquíes, ha desencadenado una "acción extrema" en la que va incluida la destrucción de lo que queda de infraestructura en la franja. Los responsables del ataque piden la liberación de las cerca de 100 mujeres y los 300 menores palestinos presos en Israel por su vinculación -real o supuesta- con la resistencia. Son una pequeña parte de los más de ocho mil recluidos en cuarteles o en prisiones civiles, muchos secuestrados por los ocupantes y mantenidos indefinidamente en un régimen de "detención administrativa", es decir, sin ser sujetos a juicio alguno. En las hectáreas controladas por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) hay muchos otros presos por participar de algún modo en agresiones contra israelíes. Dice Amnistía Internacional: "Las autoridades israelíes sostienen que los soldados únicamente abren fuego cuando peligra su vida y sólo responden a la fuente de procedencia del fuego palestino, pero el elevado número de palestinos desarmados muertos a manos de las fuerzas israelíes en los últimos cinco años y medio, entre ellos más de 600 niños, indica lo contrario". ¿Y cuántos militares de Tel Aviv están en la cárcel por alguno de esos asesinatos? En efecto: ninguno.
Dice Isa Escobar: "En México siguen con la falsa creencia de que los niños nacidos en Francia son franceses... Pues no, mi hijo nació aquí, en París en el 2001, pero ya desde 1993, un niño sólo podía "heredar" la nacionalidad francesa. Así que mi pequeño es méxico-colombiano, pero no francés".
Carlos Morales Mateluna , desde Costa Rica, me corrige con tino: el procurador estadunidense se llama Alberto, y no Albert, Gonzales. Y nos regala un testimonio: "Yo trabajé durante 3 años como médico en el barrio de Liberty City, donde la pobreza y el abandono son evidentes. El nombre es por demás irónico. Queda ubicado en la calle 79 del NW, con la avenida 27. Si alguna vez va por Miami, tómese la molestia y maneje por los vecindarios de Overtown, o por el norte de Miami en la calle 62 (Martin Luther King) parecen zonas devastadas por la guerra, pero no, lo son por la pobreza, el racismo y el abandono a los que los someten los que dominan Miami, los verdaderos terroristas que atacaron y atacan sin cesar a Cuba".
Pablo Espinosa Vera escribió el libro El Peje, presidente: ¿utopía semiótica?, y lo difunde (gratis) en formato digital. Las huellas entrañables de Nelson Iríñiz Casás, autor de Corrupción en la ONU, pueden encontrarse también en el ciberespacio. Fausto Zapata se ha puesto a hacer un blog amplio y diverso. Ulysses Ozaeta nos informa de la existencia de Corporativo 9, grupo radial formado por "un grupo de estudiantes y profesionistas, que al no tener las oportunidades laborales en México, tuvimos que emigrar a los Estados Unidos y Canadá". El colectivo da alimento auditivo "a una gran cantidad de páginas de Internet y tres estaciones piratas de FM, y nuestros locutores tienen plena autonomía". Alonso Núñez, por su parte, invita al estreno mundial de su bló.
Milton Rodríguez: déjame buscar algo sobre la tal secta gnosis, a ver con qué me topo, y abrazos para María Belmonte en Monterrey, Jaime Cortés, Wilibaldo Patiño Villalobos, en Michoacán, Benjamín Ortiz Espejel, en Puebla, Ranulfo Piña Guillén, Liliana la locombiana, Verónica Abigail Hernández, José Burciaga, Raúl Enríquez Habib, Miguel Palma, Rosa Martha Jasso y José Pamplona Muñoz.
En México han llegado a su fin las campañas políticas y nos han dejado como herencia, sostiene Plaqueta, imágenes electorales completamente inútiles:
Ahora sí, dentro de una semana, la omnipresencia candidatil empezará a ser arrancada de muros y postes por un montón de güeyes contratados para tal efecto. Todo volverá a la normalidad, no sé si para bien o para mal. Temo amanecer con un vacío existencial: chin, ya no hay campañas, ¿y ahora?
Fueron meses bonitos . Amé gruñirle a los jjJJjjJjJóvenes panistas en la calle, amé las feroces discusiones de sobremesa, amé los anuncios horrorosos que desesperadamente trataban de aprovecharse de la fiebre futbolística (de una lógica aplastante todos ellos). Voy a extrañar actividades de alta circunspección, como horrorizarme por los dientes afilados de Döring o encontrar parecidos entre los candidatos y actores hollywoodenses. Madrazo es Nicholas Cage, caray.
Iván Robles tambié n tiene hallazgos fabulosos, como la impactante similitud entre Marcelo y el Dr. Descuento. Y la mejor de todas: el único y legítimo José Alfredo Jiménez, al cual, me cae, que eligieron nomás por el nombrecito (me imagino a unos priístas ofreciéndole la candidatura, aunque originalmente se dedicara a la talabartería).
"Encuentra las cinco diferencias"
Y cómo extrañaré al Dr. Simi (para servirle a Dios y al pueblo), aunque creo que ese güey tan desquiciado nunca se agotará como fuente de eterna pitorrez. En fin. Espero amanecer el 3 de julio y tener buenos motivos para, por primera vez, tomarme con un poquito de seriedad las elecciones. O mejor no.