¡Excelente! Creo que algunas de tus imagenes (no sólo de esta entrada) merecen un público más amplio que este blog. ¿Pero no que me dijiste que no eres adorador de la vagina? ¿Cómo explicas esto de que la ves en todas partes?
Hola Pedro. Yo siempre he dicho que el sexo es lo que mueve al mundo. Como consecuencia, ahora tengo una hija maravillosa que no quiere dormirse por lo que nos estamos desvelando (mi esposa dándole de comer y yo leyendo tu Blog, desde Alemania).
Siempre he creído que la frontera entre lo erótico y lo pornográfico es una cuestión de intencionalidades tanto del emisor como del receptor, y bueno, caí redondito.
En estos momento me voy a misa a ver si con unos golpes de pecho, se me salen esas ideas, je.
Roque nuevo: Gracias; las imágenes están puestas, precisamente, para el público de este blog. Oye, nunca he hablado contigo acerca de mis sentimientos hacia la vagina, y no sé de dónde sacas que "la veo en todas partes". ¿No serás tú el que la ve por todos lados? Porque yo lo único que puse en el post son detalles de rostros y de manos. Abrazo.
Anónimo: 'Tas atrasado de noticias: sexo y paternidad ya son cosas diferentes y no tiene por qué haber relación causal entre ellas. De todos modos, felicidades. Disfruta mucho a tu hijita y va un abrazo para los tres desde aquí a las Germanias.
Víctor: Una definición que me gustó (por cínica, aunque falsa) sobre la diferencia entre lo erótico y lo pornográfico, decía así: "Si está borroso, es erótico; si está en foco, es pornográfico". Abrazo.
La piel, eso que el hombre y mujer tienen por todas partes, son el objeto de la línea delgada entre Eros y porno y adorablemente trasgredida por hombres y mujeres, yo en particular no califico ni uno ni otro, no es que sea tolerante, quizás más allá, practico desde el respeto la mas ruda indiferencia sobre lo que le guste y/o practique cualquier ser humano, pero desde luego a capa y espada defiendo todo lo referido al ser que se goce mis arranques eróticos y lo que lleven ellos, los afectos.
Tlacui: Bueno, de hecho se supone que estás enfermo y que te estás curando. Ora, si de alguna manera se te conectó la tripa con la imaginación, pus eso ya no sé.
Alejandro: consigo ver diferencias de grado entre erotismo y porno, mas no una línea nítida entre ambos.
¿Qué es pornografía?, dices mientras clavo mi cosa en tu casa color de rosa, húmeda... ¿Y tú me lo preguntas, Desdémona? ¡Pornografía eres tú!
Y no digáis que, agotado de coger, de leche falta, enmudeció la viga; podrá no haber pornáufragos; pero siempre habrá pornosofía.
Nota Bene para mi estimado Pedro: La esposa de Gustavo A. Becquer se llamaba Casta, y le era infiel; pero él no cantaba mal las rancheras: padeció quién sabe qué enfermedad venerea. Debió haberse llamado Gustavo Henry Bukowsky, y escribir La rima es un perro infernal...
Agustufa divina: Oye, y yo que me sentía tan solo en el deporte de chingarle la madre a Bécquer. ¡Gracias por la agradable compañía! Antes me daba por alterarle sus Rimas, pero luego he encontrado una perversidad mayor: leerlas tal cual, que no hay que cambiarles nada para apreciar su pornografía espléndida:
No sé lo que he soñado en la noche pasada; triste muy triste debió ser el sueño, pues despierto la angustia me duraba.
Noté al incorporarme húmeda la almohada, y por primera vez sentí al notarlo de un amargo placer henchirse el alma.
O bien:
¿No sentiste una lágrima mía deslizarse en tu boca, ni sentiste mi mano de nieve estrechar a la tuya de rosa?
Hola Pedro. Tu sugerencia me recordó las fotos de Henri Maccheroni y su serie 2.000 photos du sexe d'une femme. Aquí anoto el link por si quieren ver. http://www.photographie.com/talent/eros/fr/index.html
Getsemaní: Se extrañaba un comentario tuyo en este post, y gracias por el url de esas fotos espléndidas. Ahora acabo de descubrir --pero qúe pinche ignorante que es uno-- relaciones entre Bécquer y la pornografía mucho mas "carnales" que las que consigné aquí. La semana entrante las posteo.
12 comentarios:
Hola Pedro,
¡Excelente! Creo que algunas de tus imagenes (no sólo de esta entrada) merecen un público más amplio que este blog. ¿Pero no que me dijiste que no eres adorador de la vagina? ¿Cómo explicas esto de que la ves en todas partes?
Un abrazo
Hola Pedro.
Yo siempre he dicho que el sexo es lo que mueve al mundo. Como consecuencia, ahora tengo una hija maravillosa que no quiere dormirse por lo que nos estamos desvelando (mi esposa dándole de comer y yo leyendo tu Blog, desde Alemania).
Pedro Miguel:
Siempre he creído que la frontera entre lo erótico y lo pornográfico es una cuestión de intencionalidades tanto del emisor como del receptor, y bueno, caí redondito.
En estos momento me voy a misa a ver si con unos golpes de pecho, se me salen esas ideas, je.
Suerte y abrazos.
Roque nuevo: Gracias; las imágenes están puestas, precisamente, para el público de este blog. Oye, nunca he hablado contigo acerca de mis sentimientos hacia la vagina, y no sé de dónde sacas que "la veo en todas partes". ¿No serás tú el que la ve por todos lados? Porque yo lo único que puse en el post son detalles de rostros y de manos.
Abrazo.
Anónimo: 'Tas atrasado de noticias: sexo y paternidad ya son cosas diferentes y no tiene por qué haber relación causal entre ellas. De todos modos, felicidades. Disfruta mucho a tu hijita y va un abrazo para los tres desde aquí a las Germanias.
Víctor: Una definición que me gustó (por cínica, aunque falsa) sobre la diferencia entre lo erótico y lo pornográfico, decía así: "Si está borroso, es erótico; si está en foco, es pornográfico".
Abrazo.
¿estaré enfermo?..en la quinta fotografía, aún con un clic, me sigo imaginando cosas.
Saludos:
La piel, eso que el hombre y mujer tienen por todas partes, son el objeto de la línea delgada entre Eros y porno y adorablemente trasgredida por hombres y mujeres, yo en particular no califico ni uno ni otro, no es que sea tolerante, quizás más allá, practico desde el respeto la mas ruda indiferencia sobre lo que le guste y/o practique cualquier ser humano, pero desde luego a capa y espada defiendo todo lo referido al ser que se goce mis arranques eróticos y lo que lleven ellos, los afectos.
Pedro Miguel, te leo.
Alejandro Vakéen
http://andakie.blogspot.com/
Tlacui: Bueno, de hecho se supone que estás enfermo y que te estás curando. Ora, si de alguna manera se te conectó la tripa con la imaginación, pus eso ya no sé.
Alejandro: consigo ver diferencias de grado entre erotismo y porno, mas no una línea nítida entre ambos.
Nos leemos.
RIMA 69
¿Qué es pornografía?,
dices mientras clavo mi cosa
en tu casa
color de rosa,
húmeda...
¿Y tú me lo preguntas, Desdémona?
¡Pornografía eres tú!
Y no digáis que, agotado de coger,
de leche falta, enmudeció la viga;
podrá no haber pornáufragos;
pero siempre habrá pornosofía.
Nota Bene para mi estimado Pedro: La esposa de Gustavo A. Becquer se llamaba Casta, y le era infiel; pero él no cantaba mal las rancheras: padeció quién sabe qué enfermedad venerea. Debió haberse llamado Gustavo Henry Bukowsky, y escribir La rima es un perro infernal...
Agustufa divina: Oye, y yo que me sentía tan solo en el deporte de chingarle la madre a Bécquer. ¡Gracias por la agradable compañía! Antes me daba por alterarle sus Rimas, pero luego he encontrado una perversidad mayor: leerlas tal cual, que no hay que cambiarles nada para apreciar su pornografía espléndida:
No sé lo que he soñado
en la noche pasada;
triste muy triste debió ser el sueño,
pues despierto la angustia me duraba.
Noté al incorporarme
húmeda la almohada,
y por primera vez sentí al notarlo
de un amargo placer henchirse el alma.
O bien:
¿No sentiste una lágrima mía
deslizarse en tu boca,
ni sentiste mi mano de nieve
estrechar a la tuya de rosa?
Abrazo, Agustín.
Hola Pedro.
Tu sugerencia me recordó las fotos de Henri Maccheroni y su serie 2.000 photos du sexe d'une femme. Aquí anoto el link por si quieren ver.
http://www.photographie.com/talent/eros/fr/index.html
Saludos.
Ah, qué buen re-encuadre a las rimas de Bécquer, aunque los fragmentos que una vez subiste de Santa Teresa sí que eran cachondos.
Getsemaní: Se extrañaba un comentario tuyo en este post, y gracias por el url de esas fotos espléndidas. Ahora acabo de descubrir --pero qúe pinche ignorante que es uno-- relaciones entre Bécquer y la pornografía mucho mas "carnales" que las que consigné aquí. La semana entrante las posteo.
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