23.6.09

Argumentos para el gobierno


La culpa fue del aparato de aire acondicionado, en la edificación vecina o del tipo que lo dejó encendido. La culpa fue de un inspector que no pudo darse cuenta (o que cobró por no darse cuenta) de la ausencia de extinguidores, alarma y salidas de emergencia.

La culpa fue de un albañil idiota que puso plafones de plástico combustible y de su jefe, que no lo instruyó sobre la improcedencia de ese acabado. O de unos desconocidos que pretendieron provocar un incendio en la bodega de junto para destruir papeles comprometedores que indicaban hechos de corrupción en algún nivel de gobierno. O de un funcionario federal de medio pelo que no revisó a conciencia las condiciones en que se encontraban esa y otras guarderías subcontratadas por el IMSS. O de los bomberos, por no acudir al lugar de la catástrofe en los primeros segundos de la tragedia, o por no haber hecho rondas regulares por la zona.

La culpa es de la crisis económica, que no ha permitido invertir en el bienestar de la población todos los recursos que los gobernantes, ordenados y generosos, desearían, y que los ha obligado a buscar mecanismos para abaratar las prestaciones. La culpa es de Zedillo, de Echeverría, de Lázaro Cárdenas, de Pascual Ortiz Rubio, quienes no previeron el crecimiento en el número de derechohabientes.

La culpa es de los derechohabientes, que meten a sus hijos en guarderías del Seguro en lugar de pagar, como se debe, en establecimientos privados, más pequeños y con atención personal garantizada. La culpa es de los clasemedieros y de los pobres, los que no se han esmerado lo suficiente en conseguir una palanca, una influencia, un parentesco para hacer un poco de capital y poner, ellos, negocios como la ABC. La culpa es de quienes todavía no se convencen de la conveniencia de ordeñar al Estado en esa y en otras clases de contratos prósperos.

La culpa es de los sonorenses, por vivir en un lugar tan cálido que se requiere de un cooler por cada 10 metros cuadrados. O de los investigadores científicos, quienes desgraciadamente aún no tienen lista una alteración genética que permita desarrollar bebés no inflamables. La culpa es de Colosio, quien se dejó asesinar e incumplió de esa forma su deber de impedir que el cuidado de los menores fuera dejado al ai’ se va, al haiga sido como haiga sido que permiten el aprovechamiento a fondo de oportunidades sexenales.

La culpa es de quienes no quieren que este país progrese, carajo, de los que todo lo ven negativo, de los pesimistas que descalifican y se lamentan en vez de hacer propuestas factibles y formular críticas constructivas. La culpa es de los narcos, quienes obligan al gobierno a destinar grandes recursos al combate contra las drogas e impiden de esa forma que las instituciones públicas se hagan cargo de sus tareas sin tener que recurrir a los esquemas de subrogación.

Los tres niveles de gobierno colaboran activamente en la promoción del empleo, en multiplicar las oportunidades de negocio para reactivar la economía, en atender con seguridad, calidad y dignidad las necesidades de la población, en el esclarecimiento de hechos trágicos que todos lamentamos y que, ya ven, tienen múltiples responsables posibles. No se encubrirá a nadie, se aplicará la ley sin excepciones, la estrategia es la correcta, marchamos con rumbo firme, los enemigos de México no van a derrotarnos. Bla, bla, bla.

11 comentarios:

Ana Jácome dijo...

Y mientras nos reparten la culpa a todos, porque entre silencio y conformismo todos acabamos siendo cómplices de desventuradas tragedias... entre tanto culpable, ¿Quién queda para no olvidar a eso 47 bebés? ¿Hasta cuándo habremos de cansarnos de ser los que observan? ¿Hasta cuándo nos hartaremos de que barajeen guarderías y New's Divine como si nadie hubiera muerto, como si no fuera una muestra del precario estado que vive nuestro país?
Recuerdo voces que escuchaba el sábado cuando, sin previo aviso, me vi rodeada por la marcha del orgullo lésbico-gay: Los que miran también son maricones, gritaban los que marchaban.
Y dice el presidente que por andar en la lucha con el narco está en riesgo la vida suya...y mira el riesgo que rodeaba a aquéllos, pequeños, sólo por ser hijos de madre trabajadora y haber nacido mero en medio de la clase media....
¿Hasta cuándo nos veremos hastiados de esos, pseudofuncionarios, nuestros mal logrados empleados?

En esto, no hay palabras; sólo enojo.

Un saludo

Bogador y caminante dijo...

El humor será, siempre y también, una excelente arma de lucha.

Felicidades, Pedro Miguel, por tu artículo.

Un gran abrazo

Bogador y caminante dijo...

Ya sé... ¡lo dices totalmente en serio!

... la culpa la tenemos los que no sabemos leer ...

Lola dijo...

Yo creo en la reflexión del buen Chico Ché:

La culpa no es de la estaca, si el sapo llega y se ensarta.

O lo que es lo mismo: cada pueblo tiene el gobierno que se merece.

Que pena por esta y tantas tragedias, pero me choca que siempre se pretenda solucionar problemas en vez de prevenirlos. O que nos ocupemos cuando ya pasó una desgracia, cultura mexicana (o latina, o mundial) y nada más.

Abrazo

maría de lourdes aguirre beltrán dijo...

I

La impunidad se avecina,
en el caso de Sonora;
pues tanto ayer, como ahora
nuestro gobierno asesina.
Grande es la rabia y la "muina"
que la tragedia ha causado
por tanto infante atrapado
en esa trampa mortal
un galerón infernal
como guardería montado.

II

Es un botón que nos muestra
lo que daña la rapiña:
No se salva niño, o niña
de esta actividad siniestra.
Hay que tomar la palestra
para justicia gritar
no debemos de callar
No condenar al olvido
el fuego que ha consumido
las cunas de tanto hogar.

III

Dicen que investigarán
la causa de tal horror,
Es que no tienen valor;
mas claro, no lo verán.
El Seguro, te dirán:
no gasta en instalaciones
para niños pobretones
Mejor hace un gran negocio
con algún pariente y socio
con dinero de a montones.

IV

Ha declarado en lugar
público, con mucha gente
un hombre que es inconciente:
Es mejor trampa, que hogar.
Ese hombre, debe pensar:
Si gobierna, su misión
representa a la nación.
Nunca primero el negocio
con un familiar de socio
p'a darle una concesión

V

Si el gobierno va a tapar
este horrible asesinato
debemos en este rato
las guarderías visitar.
Las escuelas reportar
a la prensa y a los medios
debemos poner remedios:
Escuelas y guarderías
seguras para las crías
Construídas en dignos predios.


María de Lourdes Aguirre Beltrán

LaSusodicha dijo...

La culpa es de los niños que permanecieron dormidos -¡qué irresponsabilidad!- mientras a su alrededor se cocinaba ésta tragedia. Ahora los padres de los fallecidos pagarán una remuneración económica a los dueños de la guardería, al IMSS y al gobierno de Sonora, pues el daño moral que éstos han sufrido ha sido grave. Y ya. Caso cerrado. Una vez más, la implacable justicia mexicana en acción.

Ahora que recién se descifró el genoma mexicano, me pregunto si encontraron el gen de la paciencia sin límites -por no decir estupidez-...Pasta de Conchos, New´s divine, guardería ABC, y un interminable lista de humillaciones. Nuestra clase política sabe muy bien que su mejor aliado es la infinita tolerancia de éste pueblo, al que joden sin mesura.

La musa enferma dijo...

la culpa la tiene el origen de todas las cosas...

La musa enferma dijo...

Si no existiéramos nada hubiera pasado...

Pedro Miguel dijo...

Querid@s: yo por eso digo que hay que aplicar --desde las calles, si es necesario, pero siempre en forma pacífica-- el Artículo 39 de la Constitución: "El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno." Con la mafia que desgobierna nos arriesgamos a que se mueran muchos más niños.

jum dijo...

ah, verdá? ahi se acabó el tema...

María dijo...

Y como se leìa en una de las mantas en la marcha de protesta : " La culpa no es del cooler sino de los culeros "