Aterrizamos ayer y era cumpleaños de Neruda, y nada es como entonces, y es ésta una ciudad apacible y moderna hasta en sus rincones viejos. Pero en las calles hay chispas y otros síntomas de incendio.
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Nunca nada es como en 'aquellos tiempos' pero qué tiempos estos de usted por allá, en que 'aquellos tiempos' se evocan e iluminan otro camino por andar. Disfrute! Y gracias pro escribir, que se le lee con harto gusto. Abrazos
1 comentario:
Nunca nada es como en 'aquellos tiempos' pero qué tiempos estos de usted por allá, en que 'aquellos tiempos' se evocan e iluminan otro camino por andar. Disfrute! Y gracias pro escribir, que se le lee con harto gusto.
Abrazos
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