Tenemos al alcance de la mano
en este 2012 que comienza,
el darnos un país por recompensa
pacífico, amoroso y soberano.
Vayamos, de la costa al altiplano,
a organizar el voto y su defensa.
Hagamos entre todos una inmensa
marea de sufragio ciudadano.
Si bien ha de ser dura la faena,
que nadie desfallezca ni desista
porque el fruto, al final, valdrá la
pena:
una nueva nación está a la vista
si obtenemos el triunfo con MoReNa
y con el Movimiento Progresista.
1 comentario:
¡Adorable sonetero, ojalá lo cantes en armonía!
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