- Herodes Sharon
y Herodes Hamas
- Palestina: heroísmo social
- Arafat según Gorostiza, Vallejo o Sabines
LAS PÁGINAS DE INTERNET de los ministerios de
Educación suelen resaltar logros en términos de cobertura e infraestructura,
exaltar programas y planes, y hasta informar acerca de desafíos educativos
propios del país al que pertenezcan. Para la dependencia palestina encargada de
la enseñanza el principal problema pedagógico es la matanza de alumnos de
primaria y secundaria, y la demolición de planteles por parte de las fuerzas
israelíes ocupantes. En su recuento informativo, el sitio correspondiente
ofrece noticias como la que sigue: el 8 de noviembre se da a conocer un reporte
sobre los 2 mil 500 menores palestinos arrestados por las fuerzas ocupantes y
los 300 que aún permanecen presos. 400 alcanzaron la mayoría de edad en la
cárcel y en su mayor parte son recluidos en centros alejados de sus lugares de
residencia. Los niños y jóvenes están sujetos a tratos crueles, inhumanos y
degradantes, como golpes, privación de alimentos y de sueño, órdenes de
mantener posiciones incómodas o dolorosas por periodos largos y amenazas de
muerte, agresión sexual o represalias contra sus familiares. A los muchachos se
les mantiene aislados mientras son interrogados por los servicios de seguridad,
la inteligencia militar o la policía, y se les niega la asistencia de abogados
o la visita de parientes. Para los padres de niños palestinos presos resulta
extremadamente difícil, si no imposible, saber en dónde se encuentran detenidos
sus hijos.
Captura de
un niño palestino por las fuerzas ocupantes
EL INFORME, ELABORADO por el ministerio palestino
para asuntos de detenidos, me resulta verosímil, porque en septiembre de 1994,
en Ramallah, entrevisté a dos hermanos de 14 y 15 años --ojalá sigan vivos,
pero lo dudo-- que acababan de pasar uno y dos años en prisión,
respectivamente, por haber tirado piedras a los soldados ocupantes, y al
narrarme sus vivencias en la cárcel los chavos me contaron que habían sido
víctimas de todas las prácticas enumeradas arriba, con excepción de la amenaza
de agresión sexual. El cautiverio les endureció la mirada en forma prematura y
les inculcó una férrea y escalofriante determinación de morir por su patria. La
propaganda israelí afirma que los libros de texto de la Autoridad Nacional
Palestina (ANP) inculcan a los escolares el odio a Israel y el Ministerio de
Educación palestino niega la acusación. No he podido hacerme con ejemplares de
esos libros (ni con un traductor que me los explique), pero me parece que la
imputación israelí es tan improcedente como sería afirmar que Estados Unidos ha
logrado mantener la ocupación de Irak gracias al contingente militar
salvadoreño que se encuentra en ese país árabe. Si los jóvenes, los adultos y
los viejos palestinos detestan a Israel es porque su país ha sido destruido
conforme se iba construyendo el Estado judío, el cual se conduce ahora en Gaza,
Cisjordania y la Jerusalén oriental con modales semejantes a los que exhibió
Saddam Hussein durante su breve ocupación de Kuwait, o Slobodan Milosevic en
Bosnia y en Kosovo. Ah, pero las mentes sesudas de la propaganda de Israel
lamentan que la imagen de ese país sea presentada en forma negativa en los
libros escolares palestinos --“ha usurpado la tierra de Palestina, es opresivo
y agresivo, inflige daño físico y mental a los palestinos, viola sus derechos
humanos y trata de liquidar su identidad nacional”-- y atribuyen a ese dato,
real o ficticio, la violencia y la furia de los oprimidos y masacrados.
http://www.edume.org/
http://www.factsofisrael.com/blog/arch
ives/000305.html
El cuerpo
de Iman al-Hams
PARA SEGUIR CON el noticiario del Ministerio de
Educación de la ANP: el jueves 4 de noviembre, en Jan Yunes (sur de Gaza), dos
menores palestinos de siete y ocho años son despedazados por el proyectil de un
tanque israelí mientras jugaban en su residencia. El 30 de octubre los soldados
de Tel Aviv asesinan a dos niños en Jenin; ese mismo día se da a conocer un
reporte sobre los abusos que sufren las palestinas menores de edad que se
encuentran en centros israelíes de detención. El día 20, la agencia de la ONU
para los refugiados palestinos informa que, en su ofensiva del mes anterior en
Gaza, las tropas de Tel Aviv dieron muerte a nueve alumnos y a dos maestros de
escuelas administradas por esa entidad de Naciones Unidas. El 11, The Guardian informa de los
síntomas de estrés postraumático que presenta la mayoría de niños en los
territorios ocupados. El 8, las fuerzas ocupantes matan en Beit Hanun, norte de
Gaza, a la menor Samah Nassar, de ocho años de edad. Un día antes, Sliman Abu
Foul y Raed Abu Zeid, ambos de 14 años, son descuartizados por disparos de
tanque en la ciudad de Gaza. El 5 de octubre, en Rafah, Iman al-Hams, de 13
años, es herida por disparos de armas largas cuando pasa a 70 metros de un
puesto de guardia israelí en el barrio de Tel Sultan. El comandante de la
unidad se acercó a la niña, que yacía herida en el suelo, y la remató con dos
balazos en la cabeza. Luego regresó al puesto a buscar un cargador para su
fusil de asalto y se lo vació a corta distancia. Aunque el cadáver de Iman
tenía más de 20 heridas de bala, el ejército israelí ha dado por buena la
explicación del oficial de que se gastó todas sus balas respondiendo a fuego
hostil. Ahora se me vienen a la mente los nombres de Danielle Shefi, una
preciosa niña judía de cinco años que murió el 27 de abril de 2002, asesinada
por un terrorista palestino en un asentamiento cercano a Hebrón, y de Salwa
Hassan, una niña palestina un año mayor, asesinada 21 días antes en Rafah por
soldados ocupantes y no menos terroristas que el verdugo de Danielle. En ese
tiempo, cuando el proceso de paz parecía todavía redimible, me di a la tarea
inútil de escribir un texto en memoria de cada una de las pequeñas, así fuera para
grabarme ambos nombres y documentar esos episodios de la imbecilidad humana.
http://www.factsofisrael.com/blog/archives/000021.html
http://www.moehe.gov.ps/en/
http://news.bbc.co.uk/1/hi/world/middle_east/3748054.stm
http://www.jornada.unam.mx/2002/abr02/020430/030a1mun.php?origen=opinion.html
http://www.jornada.unam.mx/2002/abr02/020409/032a1mun.php?origen=o
Danielle
Shefi
A PESAR DE LA vesania del gobierno israelí, los
palestinos encontraron la forma de que casi 58 mil 716 estudiantes de los
territorios ocupados presentaran este año sus exámenes finales de bachillerato,
y que 35 mil 467 resultaran aprobados. El índice de reprobados (40 por ciento)
podría considerarse inaceptablemente alto en cualquier otra circunstancia
social, pero en las condiciones de la Palestina ocupada --estudiantes y
maestros asesinados, escuelas demolidas, restricciones severísimas al tránsito
de personas y vehículos, crisis económica devastadora--, el porcentaje de
aprobación de 60 por ciento denota, más que un milagro, un heroísmo social sin
precedentes. Gracias a ese heroísmo se mantiene en pie --aunque con cortes y
suspensiones intermitentes-- un sistema internético tanto oficial como civil
que da cuenta del duro acontecer político, institucional, económico, social,
informativo en Al Qods, Cisjordania y Gaza:
http://www.palestinechronicle.com/
http://www.palestinedaily.com/
http://www.alhayat-j.com/
NO ME ATREVO A decidir, por ahora, si Yasser Arafat
fue una figura clave para fortalecer la determinación de los palestinos a
seguir existiendo bajo la ocupación, o bien si esa voluntad colectiva se ha
impuesto, a pesar de la corrupción, el autoritarismo y la ineficacia de la
presidencia ahora (casi) vacante. Sea como sea, mientras Palestina sigue su
marcha hacia la emancipación o la liquidación, el rais demuestra en su cama de hospital en Francia que la muerte
no es un suceso cualitativo y singular, sino más bien una tendencia acumulativa
e indefinible, y que la definición de muerte clínica no es otra que el momento
en que se da a conocer la noticia correspondiente. Esta lenta degradación de
las funciones vitales me trae a la mente a Gorostiza (por su título Muerte sin fin), a Vallejo (Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo) y,
aunque suene grosero, a Sabines (Cuando
tengas ganas de morirte / no alborotes tanto: muérete / y ya), tres poetas
irremediablemente difuntos, en lo físico, pero cuya salud literaria está más
cabal que nunca. La agonía arafatiana, rodeada de desasosiegos relacionados con
el funeral y disputa por las herencias política o monetaria (mucho más abultada
la segunda que la primera, parece ser) me hacen recordar la del Criminalísimo
Francisco Franco. Ambos resultan meros aprendices en el arte de generar tensión
dramática con el fallecimiento si se les compara con Karol Wojtyla, quien se
lleva la indiscutible medalla olímpica tras haber permanecido varios años bajo
el manifiesto aleteo de los zopilotes. Y no hablo en sentido literal de las
aves de carroña, sino, de manera un tanto (aunque no demasiado) figurada, de
esos otros pájaros, los cardenales, que devoran con fruición los reportes
médicos de Su Santidad mientras les hierve la sangre por las ganas de salir
corriendo para ganarles a sus compinches el asiento perforado de la Silla
Gestatoria.
http://www.filosoficas.unam.mx/~morado/gorostiza.htm
http://www.poemas-del-alma.com/masa.htm
http://ciudadseva.com/texto/cuando-tengas-ganas-de-morirte/
http://www.elmundo.es/elmundo/2004/11/09/internacional/1099998737.html
http://www.elmundo.es/elmundo/2004/11/10/internacional/1100116926.html
http://www.udel.edu/leipzig/monarquia/rey01a.htm
http://barcelona.indymedia.org/newswire/display/55191/index.php