En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda. El resto della concluían sayo de velarte, calzas de velludo para las fiestas con sus pantuflos de lo mismo, los días de entre semana se honraba con su vellorí de lo más fino. Tenía en su casa una ama que pasaba de los cuarenta, y una sobrina que no llegaba a los veinte, y un mozo de campo y plaza, que así ensillaba el rocín como tomaba la podadera. Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años, era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro; gran madrugador y amigo de la caza. Quieren decir que tenía el sobrenombre de Quijada o Quesada (que en esto hay alguna diferencia en los autores que deste caso escriben), aunque por conjeturas verosímiles se deja entender que se llama Quijana; pero esto importa poco a nuestro cuento; basta que en la narración dél no se salga un punto de la verdad.
Bien. Ahora, en el traductor de Google, nuestro ingenioso hidalgo realiza el siguiente recorrido:
español > alemán > francés > inglés > italiano > húngaro > polaco > rumano > sueco > checo > holandés > albanés > estonio > español
El resultado:
Con este fin, el pueblo de La Mancha, cuyo nombre no debe olvidar que en mucho tiempo, el hombre ha vivido en el jardín con una lanza, un escudo, una antigua, jirones Hack y galgo corredor. Mash es un poco más de vaca-RAM, por lo general en la noche, una mezcla de pérdida duelos sábado, las lentejas, viernes, domingo, con tres secciones Palomino patrimonio. Velar otras pruebas, mullidas zapatillas zapatos el día de la semana fue muy bien salir de Vellore. Cuando en el hogar, en los años cuarenta, y sigue siendo tjugohundraett espacio vectorial y lugar, cortar con tijeras Hack. Friso de más de cincuenta años, nuestra piel, carne seca, seca por la mañana, y como un buen amigo en el juego. Creo que este es el sobrenombre de Quijada Quesada (la diferencia entre el autor, en este caso), si hay suficiente izquierda, Quijano, pero las preguntas en la historia, la historia que realmente no tiene sentido.
12.9.10
“jirones Hack”, o la vuelta al mundo
en 13 lenguas de viaje submarino
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4 comentarios:
Por ahí de 1985, yo me maravillaba de poder jugar ajedrez con una computadora Cómodore 64, esperando eternidades actuales(no parecía demasiado esperar media hora o mas), en los niveles más competentes,para cada jugada. Ahora puedo jugar usando reconocimiento de voz y escuchando la respuesta instantáneamente mediante un sintetizador. Bastante estúpido se ve Google para traducir al Quijote, pero hay que recordar el gran estupor de Kasparov cuando fué vencido por Deep Blue en 1997. Cosas veredes, Sancho.
Para Jum: La derrota de Kasparov ante Deep Blue fue cuestionada y hay muchismas dudas. El sentido del lenguaje ocupa mas que una supercomputadora, el lenguaje es un aprendizaje continuo en los humanos. por eso las maquina dificilmente podran interpretar lo que expresamos . Saludos.
Pues yo opino que, ante Cervantes, el traductor de Google se vio genial, creativo y sorprendentemente lúcido.
ándenles. paque se nos quite lo tecnófilos. Pues le puse a hacer el mismo recorrido al capítulo 68 de Rayuela, y no creo que Cortázar note mucha diferencia, aunque sí se notan las recurrencias de google con los términos, RAM y otros similares.
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