26.9.06

Excomulgado




La Iglesia excomulgó al polémico monseñor Milingo

La Santa Sede tomó la medida luego de que el prelado africano ordenara sin permiso a cuatro obispos casados; es la pena más severa de la Iglesia

CIUDAD DEL VATICANO (AFP).— El controvertido ex arzobispo de Zambia, Emmanuel Milingo, fue excomulgado por el papa Benedicto XVI tras haber ordenado cuatro obispos sin permiso, informó la Santa Sede. Monseñor Emmanuel Milingo "está en una condición irregular y claramente está progresivamente rompiendo la comunión con la Iglesia", sostiene el comunicado divulgado por la Santa Sede. "Está en curso la scomunica latae sententiae [sentencia de excomunión] prevista por el artículo 1382 del Código del Derecho Canónico", precisa el comunicado, por lo que el arzobispo no necesita ser juzgado previamente. Se trata de la pena más severa que prevé la Iglesia Católica para un creyente.


El arzobispo de Zambia, Emmanuel Milingo, de 76 años, el representante más carismático de la iglesia africana, exorcista y curandero, ordenó recientemente a cuatro obispos casados en Estados Unidos, razón por la que fue automáticamente excomulgado. La sentencia de excomunión se aplica también a los cuatro religiosos que fueron consagrados obispos ilegalmente por el arzobispo Milingo el 24 de septiembre en Estados Unidos. Sólo el pontífice puede autorizar la ordenación de obispos, según las leyes de la Iglesia.

Los cuatro religiosos ordenados formaban parte del movimiento internacional "Married Priest Now", fundado en julio pasado por el prelado africano en Washington, Estados Unidos. "Representantes de varios niveles de la Iglesia intentaron contactar en vano al arzobispo Milingo para disuadirlo de seguir provocando escándalos, lo que afecta ante todo a los fieles que lo siguen en su trabajo pastoral de asistencia a los pobres y los enfermos", subraya el comunicado del Vaticano.

No deja de caerme bien este Milingo, aunque se haya casado con una tipa de la secta Moon. Éste por lo menos se acuesta con moonies y no con niños, como otros que usted conoce y que siguen recibiendo los sacramentos, Monseñor.

7 comentarios:

marichuy dijo...

La "Santa Madre Iglesia Católica, Apostólica y Romana" debería dejarse de tanto remilgo. Es preferible que se olviden de impedimentos, las más de las veces hipócritas e imposibles, como la castidad y el celibato. Y ya que cada ministro de culto decida a su muy santa voluntad lo que prefiera. He dicho.

PS No creo que me quieran excomulgar por decir esto: “Que la paz te acompañe, Pedro”

Pedro Miguel dijo...

Qué vengativa eres, Marichuy. Dios te puede castigar por tus malos sentimientos.

marichuy dijo...

Hey Pedro, ¿vengativa? Y yo por qué, diría el ilustrísimo Presichente.

Pedro Miguel dijo...

... Porque hace unos cuantos posts te lancé un improperio semejante, de esos que ni los negros quieren, ya que te pones foxista, y hasta me acusaste de compartir sotanas con Abascal, o qué sé yo. Pero está bien, está bien. En algún pasaje de José Luis Borgues hallaré algo sobre las virtudes del perdón.

Anónimo dijo...

Perdón y acompañamiento... son dos virtudes olvidadas por la iglesia católica... por mi parte, digo que deben volverse a sus orígenes y que vean que hace un milenio y ciento y pico de años, los sacerdotes casados eran bien vistos. Clemente V hizo un revolotijo por sus arranques de furia ortodoxa, y nos dejó como herencia, curas pederastas e hipócritas...

Pedro, en "El jardín de los senderos que se bifurcan", si bien Borges no hace una apología del perdón, sí nos da herramientas para comprender las posibilidades humanas, que, digo yo, son a final de cuentas lo mismo.

Un saludo desde esta parte del planeta.

marichuy dijo...

Pedro (y de paso Torresvera)

Si son de Borges o de Baudelaire, bienvenidas sean todas las apologías del perdón -no estoy segura de que el francés escribiera algo semejante-, aunque sean en venganza.

PS Nada más no te vayas a vengar enviándome algo como el "supremo perdón azul" que le espetó Manuel Espino a Jelipillo el pasado 10 de septiembre.

Anónimo dijo...

Que es Borgues, no Borges, vola de ijnorantes. Más rezpeto a las institusiones i a mi imbestidura, por fabor.